El déficit de personal calificado en el área de tecnología de software es un desafío significativo a nivel global, que requiere esfuerzos concertados en educación, políticas de retención y estrategias de contratación más flexibles y atractivas.
23/08/24 | El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) estimó un déficit de más de un millón de programadores en América Latina para 2025. El motivo de esta carencia es multicausal. En parte es consecuencia del rápido crecimiento del sector tecnológico: la demanda de soluciones innovadoras está en constante aumento, impulsada por la digitalización y la adopción de tecnologías emergentes como inteligencia artificial, blockchain y big data. Este rápido crecimiento crea una brecha entre las habilidades actuales de los profesionales y las nuevas habilidades requeridas.
Por otro lado, la demanda de personal no es acompañada por las instituciones de formación, en tanto no actualizan sus programas lo suficientemente rápido para alinearse con las necesidades del mercado laboral, siendo carentes de un enfoque con habilidades prácticas y experiencia real durante la educación formal.
Lo interesante en este asunto es que han cambiado las reglas de juego: en un pasado cercano, el mercado laboral estaba dominado por las empresas que podían seleccionar libremente a sus candidatos dada la sobreoferta. Hoy, son las empresas las que se pelean por un talento escaso.
Las consecuencias son ineludibles de acuerdo con las leyes de oferta y demanda: alta demanda de un recurso escaso= ¡Costos Elevados! La escasez de talento está llevando a salarios más altos y mayores costos de reclutamiento y retención. En tanto, las estadísticas muestran que un programador en promedio se queda sólo nueve meses en una empresa.
Asimismo, la alta demanda de profesionales calificados a nivel global resulta, en muchos casos, en una escasez de talento local, obligando a las empresas a verse presas de retrasos en el desarrollo y lanzamiento de productos debido a la falta de personal adecuado. Algunas, incluso, optan por subcontratar proyectos a países con una oferta mayor de talento calificado, lo que puede implicar desafíos de comunicación y gestión. Y, como un círculo vicioso, todas las causales anteriores limitan la capacidad de las empresas para innovar y mantenerse competitivas en el mercado.
Pero ¿cómo mitigar este déficit? Mediante formación continua y la adopción de modelos de trabajo flexibles. Las empresas deberán focalizar esfuerzos en fomentar programas de capacitación continua para mantener las habilidades de los empleados al día con las tendencias del sector.
Por último, la sofisticación del talento hace que los profesionales también busquen mayores comodidades para ser contratados. Actualmente, uno de los factores más atractivos para los profesionales es la adopción de modelos de trabajo flexibles, como el trabajo remoto o híbrido para atraer talento de diversas regiones y facilitar la retención de personal.
Ejemplos y Casos de Estudio
En Estados Unidos, empresas como Google, Microsoft y Amazon han implementado programas internos de capacitación y bootcamps para desarrollar habilidades específicas en sus empleados.
En Europa, iniciativas como la «Coalición de Competencias y Empleos Digitales» de la UE buscan mejorar la formación digital y reducir la brecha de habilidades en el sector.
En América Latina, países como Argentina y Brasil, están invirtiendo en la educación tecnológica y fomentando startups para crear una fuerza laboral calificada.
El déficit de personal calificado en el sector de tecnología de software probablemente continuará siendo un desafío en los próximos años, pero con una combinación de esfuerzos educativos, empresariales y gubernamentales, es posible reducir significativamente esta brecha. La inversión en formación y desarrollo de talento será crucial para sostener el crecimiento y la innovación en este sector tan dinámico.