Con el incremento de eventos climáticos extremos, como huracanes, incendios forestales, inundaciones y sequías, las aseguradoras enfrentan nuevos desafíos en la gestión de riesgos. ¿Qué porcentaje de aseguradoras está priorizando la cobertura de riesgos climáticos? ¿Cómo se reinventan para enfrentar el cambio? ¿Qué tecnologías utilizan y qué tipo de nuevos productos lanzan?
25/3/25 | En respuesta a los eventos climáticos extremos, muchas aseguradoras comenzaron a desarrollar productos específicos para atender estas necesidades. Entre ellos destacan los seguros paramétricos, que compensan a los asegurados cuando ciertos eventos meteorológicos alcanzan niveles predefinidos. O los seguros verdes, que apoyan proyectos de energías renovables y promueven la sostenibilidad.
De manera incipiente, aunque aún un poco tímida en LATAM, se están incorporando nuevas tecnologías para evaluar y mitigar el impacto climático: Inteligencia Artificial – IA, Internet de las Cosas (IoT), Big Data y sistemas de monitoreo satelital, en un intento de ofrecer respuestas rápidas a los asegurados.
En este sentido y de acuerdo con una encuesta realizada por ZestyAI a 200 altos ejecutivos de seguros de No Vida, “el 25% de las aseguradoras utilizan IA para evaluar riesgos asociados a tormentas convectivas, y el 18% para incendios forestales”.
A medida que los riesgos climáticos se intensifican, el sector se ha visto obligado a priorizar estrategias de sostenibilidad y responsabilidad social. Esto incluye inversiones en proyectos sostenibles, la promoción de productos ecoamigables y la adaptación de las políticas de suscripción para apoyar a empresas que adoptan prácticas sostenibles.
Y, “como la unión hace la fuerza”, muchas aseguradoras están colaborando entre sí y con organismos internacionales para compartir datos y así mejorar modelos de predicción de riesgos y establecer estrategias de mitigación. Esto fortalece la resiliencia del sector y permite una mejor adaptación a las nuevas realidades.
El sector asegurador está en plena transformación para adaptarse a los crecientes desafíos. La implementación de tecnologías avanzadas, el desarrollo de productos especializados y la colaboración entre entidades están permitiendo que las aseguradoras mitiguen riesgos y brinden mayor protección a sus clientes. Aunque no todas las compañías han dado el paso, el hecho de que un cuarto de las aseguradoras ya utilice IA para evaluar riesgos climáticos indica un avance importante hacia un modelo de negocio más sostenible y resiliente.